Gritarle al silencio, casi sin escuchar tus pasos descalza. Como si fuese la primera vez que entramos con bombos y platillos en tu casa. Dejando de dar vueltas me estoy mareando y siento que vos no me ves mas. ¿Será por eso que ya no preguntas por mí? ¿Será porque dejamos de vernos que ya no nos amamos? ¡Por dios! ¿Quién puede imaginar eso? Te voy a pedir un favor y será la última vez que te diga algo sin que me escuches (o haciendo de cuenta). Cuando me llevaste a tomar un helado de frutilla en la estación (la primera de las últimas veces), ese tren que escuchaste... no paró.